Fates Warning En Barcelona: Prólogo y apología

Todos teníamos el mismo mied0: ser los únicos de la sala. No en vano, mucha gente en KGB iba sola (entre los que me incluyo: una experiencia menos traumática de lo que cabía esperar, que olvidé con ellos sobre el escenario), tantas otras en pareja (de las que cabía esperar que un miembro, generalmente el macho, arrastraba al otro), y pocos grupos de más de dos.
No sólo compartíamos el miedo a ser los únicos, si no un extraño estupor ante el hecho de que tan poca gente conociera, o, en su defecto, fuera fan de Fates Warning. Somos gente salpicada por ciertas zonas de la orografía social de forma más o menos homogénea, que escasas veces se encuentra puesto que somos pocos. La mayoría, creo yo, hemos mostrado Fates Warning a nuestros amigos, y mi experiencia es que nunca hecha para atrás. Generalmente entra de una forma bastante fácil, sobretodo si son canciones del Parallels. Pero los amigos se quedan ahí y no buscan más. Les gusta, pero ya está. Además, el nombre de Fates Warning aparece como referencia en casi todas las páginas que hablan sobre grupos tan famosos como Dream Theater (que arrasó en la última gira) o Queensrÿche (que Déu n'hi do también, sobretodo en América), como uno de los pioneros del Progresive Metal. Ese es el trío del principio: DT, QR, FW. Yo lo conocí buscando sobre Queensrÿche. Entonces, ¿que es lo que pasa? Si te mola Dream Theater y en muchas páginas citan a Fates Warning, ¿por que la gente no investiga? ¿No les gusta el nombre? En realidad, creo yo, el fracaso comercial de FW se debe a un fallo, una anomalía de márketing, una cosa que no debería suceder.

A mi parecer la ecléctica pero inmensamente personal trayectoria de Fates Warning (y de Jim Matheos en general) me parece algo que merece un especial interés. Muchas veces me pregunto si no habré de poner a Fates Warning en mi top mental por encima de Dream Theater. Y es que, si bien a niveles objetivos de progresivismo y curro de las canciones Fates Warning es mucho más esencial, a través de los discos de éste se conoce un universo mucho más intimo, personal y profundo que en Dream Theater. Jim tiene fama de ser algo reservado, y ya hace tiempo que se nota en sus discos y en sus proyectos que decidió librarse de ambiciones, metas y restricciones y hace sencillamente lo que siente. Cosas como OSI, o Disconnected (a mi parecer una ida de olla como una catedral perfectamente encuadrada) lo demuestran. Canciones como Nothing Left to Say o Still Remains remiten a sentimientos i reflexiones inusualmente intimos, casi confesiones. A mi no me gusta discutir sobre el arte, y menos sobre su concepto, por que si no me pongo a insultar, por hacer algo, pero creo que Fates Warning se acerca mucho más a lo que parece ser que se entiende que es el arte: el retrato de un mundo personal e interior,de unos sentimientos, el acercamiento y la extrapolación de unas vivencias, de una persona.


UUUUYYY
Como veo que esto se ha torcido, acabo de decidir publicar esto como un post aparte para no entorpecer la crónica del concierto.
Espero que no se me recuerde como un defensor de mis propios fetiches i un propagandista snob i prepotente.
Solo quería, por el amor de dios, que alguien escuche esta brutalísima banda (o lo que sea de Jim Matheos).
PD:Esto viene con un retraso de más de una semana (el concierto fue el 23 de noviembre cagate).